Wednesday, September 30, 2015

Milena o el fémur más bello del mundo

Pocas veces encuentro una novela emocionante desde la primera página. Aplaudo el ímpetu con el que arranca Milena o el fémur más bello del mundo de Jorge Zepeda Patterson. Confieso que llegué a este libro por la curiosidad que me despertaron las ventas, me sorprendió gratamente que no es una historia tonta como podría vender su título. Se nos presenta la realidad de una mujer maltratada, que nos golpea de frente mientras se nos abre un espiral de mafia y corrupción. Milena, nuestra valiente Lisbeth Salander al estilo porno, es secuestrada por una mafia que trafica blancas en Europa. Es una mujer que desde muy temprano fue reducida a un pedazo de carne, vejada física y psicológicamente, como procedimiento casi registrado en toda fórmula de dominación, una jovencita se convierte en un caparazón andante que sólo piensa en venganza.
 Jorge Zepeda logra un personaje impecable que nos conmueve, nos indigna y nos arrastra con ella por el camino hacia su liberación. Se aprecia un manejo del lenguaje en descripciones que erizan la piel por su crudeza.
Milena o el fémur más bello del mundo es la novela ganadora del Premio Planeta 2014. Jorge Zepeda muestra un trabajo de investigación sobre redes de prostitución, dominando con maestría el tema, el perfil psicológico de las mujeres involucradas y posibles escenarios. Un detalle que tuvo el autor y aprecio como genialidad es intercalar entre los capítulos supuestas “declaraciones” de hombres que contratan servicios sexuales, uno de ellos Obispo, touché.

Milena o el fémur más bello del mundo es una novela sin desperdicio, para emocionarse y reflexionar. La recomiendo ampliamente.

Tuesday, September 29, 2015

Nana, una ratita librera

Nana pasaba sus días entre libros. Ya no recordaba cómo había llegado hasta allí, sabía que había llegado maltratada en cuerpo y alma. Muy debilitada por años en una fábrica donde apenas comía con calma, alguien le recomendó un lugar tranquilo donde recuperar fuerzas. Nana recordaba sacar de la caja cada libro que llegaba. Ir llenando los anaqueles también fue llenando su espíritu. Las ratas nunca han sido amigas de los libros, pero Nana era diferente, era una ratita sensible.
Con el paso del tiempo, Nana aprendió a sacudir los estantes y libros con el plumero en su cola. Adoraba caminar entre los estantes y asomarse entre los libros. Una que otra vez, Nana encontraba insectos muertos entre los anaqueles, y los tomaba como bocadillo. Quizás era el frío del aire acondicionado, o algunos libros indigestos, nunca lo supo.
La librería estaba abierta varias horas al día. A veces, Nana se quedaba hasta tarde haciendo sus tareas. Una librería no es sólo acumular libros en un local y vender, Nana se tomaba muy en serio su labor y tenía la mejor disposición en mantener ese rincón que protegía grandes tesoros. Muy temprano, la ratita llegaba un poco dormida, tomaba café y recorría los estantes. Muchas travesuras se llevan a cabo entre libros. A veces, le parecía escuchar al gruñón de Hemingway formar alboroto porque algún cliente lo había puesto en la zona de cocina. Aunque Verne se divertía cuando llegaba a la zona infantil, y empujaba sus libros a ciertos pequeñitos despiertos que volverían por más. Los libros hablan, pero lo hacen muy bajito, por eso Nana afinaba sus orejas cada día y caminaba despacito para no despertar a algunos autores problemáticos como Lovecraft que liberaba a Cthulhu y Nana tenía que cerrar la librería, liberar la red y cuando tuviera la escena controlada, recoger el desorden. Esos eran los días malos. Días buenos era tomar el té con Jane Austen y filosofar con Gibran.  Si la tarde estaba muy aburrida, abría las puertas a Falcor, aunque el Sr. Ende se molestara. De los peores días recordaba que se habían caído todos los libros de Kafka por un temblor y cuando abrió las puertas de la librería le saltaron encima un montón de cucarachas, algunas voladoras, fue un momento muy tenso, y ni se diga cuando tocó pagar la factura de esos libros que no se encontraron luego.  Así, entre aventuras, facturas, cajas y clientes, Nana pasó los días, que se convirtieron en semanas y luego, años.
Una tarde cualquiera, Nana se asomó por un anaquel y le pareció ver una cara conocida. Hace varios años, llegó a la librería una madre con su pequeño. El niño vió a Nana, que siempre era muy cuidadosa, nadie desea ver una rata en una librería. El niño corrió con mucha curiosidad y Nana corrió más rápido de lo que podía entre las líneas de libros que estaban perfectamente acomodadas en los estantes. En una curva, a la pobre ratita se le fue una pata y empujó un libro sin querer: De la tierra a la luna. El libro cayó al suelo y se abrió en una hermosa ilustración. El niño se olvidó de Nana y recogió el libro, hizo una pataleta tal que a la madre no le quedó más remedio que comprárselo. El niño volvió muchas veces por otros libros, y Nana corría por los anaqueles, dejándose llevar por su instinto, se detenía y estiraba una pata. Era un juego secreto entre ellos. Y ahí estaba, ese niño que jugó tantas veces con ella, había vuelto, ahora con otro pequeño.

El hombre buscó en todos los anaqueles y se encontró con un par de ojos temerosos, pero nada había cambiado. Nana comprendió que los libros crean lazos inexplicables. El hombre le señaló a su pequeño el anaquel, haciendo un gesto de silencio. Nana se encontró con esa mirada infantil que ya había visto antes. Y corrió.

Wednesday, September 23, 2015

La de Dios es Cristo

Como es arriba es abajo, dicta una ley metafísica. Por tanto, Dios se tomó unas vacaciones luego de crear la tierra y ver que el hombre iba por buen camino en el renacimiento. Lo que nunca se imaginó es que en unos pocos siglos íbamos a tener el mundo al borde del colapso.
John Niven recrea ese momento en el que Dios llega de vacaciones y encuentra su mundo patas arriba. Por supuesto- había que hacer algo- se le ocurre enviar a Jesús de nuevo a la tierra. Este libro es muy controversial porque simplifica toda la religión en “Sean buenos” cosa bastante lógica y con la cual estoy completamente de acuerdo. El problema con “Sean buenos” es que el ego del hombre tuvo una mejor idea y derivó en religiones que se fragmentaron, degradaron y hasta dieron origen a otros cultos. Jesús llega a Nueva York entre un caos generalizado, la decadencia de valores y el buen trabajo de Satán que emerge ante situaciones delicadas. Jesús debe hacerse escuchar. Entonces, qué mejor manera de llevar un mensaje al mundo que un concurso al más puro estilo de American Idol? Es así, Niven no tenía suficiente con la polémica religiosa, también crea una sátira sobre el 5to poder y su efecto.  El autor trabajó varios años en la industria discográfica, que se refleja en múltiples referencias musicales para gozo de los amantes del rock.

Excelente historia aderezada con mucho humor negro, no apta para religiosos, lo recomiendo ampliamente. Después de 2000 años, no está mal acompañar a Jesús en un regreso atravesando los Estados Unidos en un autobús donde Black Sabah estuvo de gira, fumando porros y robando bocadillos a empresas de seguros para alimentar a sus nuevos seguidores.

Tuesday, September 8, 2015

Constancia de la lluvia

Ciudad. Comercios. Librerías. Vitrina. Librero. Haz el acercamiento.
Ciudad. Universidad. Aulas. Profesor. Ensaya de nuevo.
Cuándo fue la primera vez que viste a un profesor sin su cargo? Cuándo fue la primera vez que reíste con un librero?   Cuántas veces has visto a la persona y no a su lugar en el mundo?
La palabra diario hace referencia a lo cotidiano, y muchas veces lo cotidiano es lo que menos advertimos. El diario de Ricardo Ramírez Requena Constancia de la lluvia nos presenta al profesor universitario y al librero, al esposo, al hombre, y al ciudadano de un país en decadencia. Un país que dificulta ser optimista cuando estás luchando con tu propio cuerpo. Constancia de la lluvia hace honor a su nombre siendo líquido, voluble; la vida del autor se presenta sencilla, llena de matices y mucha ciudad.  A veces, cruel.
Este diario es el ganador del Premio Transgenérico 2014, incluye el Diario de Ismael Da Silva, una historia que se desarrolla en la mente del autor durante el año que hizo sus anotaciones. También se encuentran muchas referencias literarias y opiniones sobre escritores, en su mayoría anglosajones, el gusto de Ricardo.
Ricardo, así de simple. Con confianza. Luego de asistir a sus clases, caminar por el bulevar de Sabana Grande, la Francisco de Miranda, entrar a varias librerías, tomar un cerveza en la playa y acompañarlo a buscar sus medicamentos, sentirás que el apellido sobra.

Celebro la valentía de exponer la mente y el alma, los miedos y los anhelos. Celebro poder leer estas maravillosas páginas impregnadas de genialidad y poder saludarlo al entrar a la librería donde labora actualmente. No es fácil exponerse, pisar fuerte. No es fácil dejar huella. Gracias por atreverte, Ricardo.